Empresarios afirman que manifestaciones no no afectaron el turismo en la parte Este del país


Tras las recientes protestas llevadas a cabo en el Este de la República Dominicana, específicamente en Bávaro-Punta Cana, los empresarios turísticos aseguran que el turismo, pilar económico del país, no se ha visto afectado.
Juan “Papo” Bancalari, presidente de la Asociación de Hoteles y Turismo de la República Dominicana (Asonahore), enfatiza que, aunque las manifestaciones no causaron daños ni alteraciones en las actividades turísticas.
“La reciente protesta en el ‘Hoyo de Friusa’ fue un movimiento popular que se desarrolló sin consecuencias negativas para el turismo. Gracias a Dios, todo transcurrió con normalidad”, comentó Bancalari.
Sin embargo, el empresario hizo un llamado a los organizadores de las protestas para que consideren otros lugares de movilización, sugiriendo que su causa se llevará ante el escenario de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
“Es esencial que los patriotas comprendan que el turismo es la principal fuente de divisas del país y debemos protegerlo. Las manifestaciones deben ser organizadas y respetuosas, evitando cualquier riesgo innecesario que pudiera afectar a nuestra industria”, añadió.
Bancalari también recordó que la República Dominicana se posiciona como un destino seguro para los viajeros, citando cifras que revelan la llegada de 11.2 millones de turistas en el último año.
“Como dominicanos, debemos ser conscientes de que el sector turístico brinda empleo directo e indirecto a más de 750,000 compatriotas. Perdamos el enfoque en la protección de nuestro país, pero nunca a expensas de nuestra economía”, afirmó.
El presidente de Asonahore subrayó que el turismo no debe ser un collateral damage en la lucha por defender ideologías y derechos. “Un verdadero patriota nunca debería hacer daño a nuestra industria turística. Este es el orgullo de nuestra nación, lo que ha posicionado a la República Dominicana en el mapa mundial”, concluyó.
En resumen, mientras las voces de protesta se escuchan, el llamado de los empresarios es claro: la defensa de la nación no debe sacrificar el bienestar económico que el turismo ha construido con tanto esfuerzo.